lunes, 26 de mayo de 2014

La puerta del ocaso II



Saskian llevaba ya recorrido más de medio camino hacia las montañas escarpadas donde sacaría de su agujero a aquel que fue condenado al olvido permaneciendo en uno de sus múltiples agujeros.

Pero antes de llegar tenía que recoger a una persona que lo esperaría en la villa Crucetroncos,  que según como le dijo el rey, le ayudaría a entrar en la zona vigilada por los soldados del círculo y le ayudaría a comprender al que iban a salvar.

Mientras avanzaba por el camino que le llevaría a Crucetroncos, la conversación con el rey volvió a su mente.

-Saskian mi idea es ir al origen del asunto que hace veinte años infesto nuestro plano con esos seres demoniacos. Para ello debemos obtener respuesta a preguntas que el circulo se negó a preguntar ya que como sabes son muy cerrados y nadie que no pertenezca a al círculo de ancianos puede obtenerlas, ni siquiera el circulo de adeptos-.

El rey hizo una pausa para ver la reacción de Saskian, el cual desde el primer momento sabía a qué se refería el rey. –Por ello el origen está en las montañas escarpadas a unas diez leguas de aquí. Allí está preso en uno de los diez agujeros que hay el mago que invoco la entrada al otro plano y por la cual se introdujeron los demonios.- Saskian salto de su asiento en ese mismo instante.

-¿Me esta diciendo que voy a ayudar, en caso de que acepte, a un preso a fugarse, y no solo a un preso, sino a un preso del circulo que fue el responsable de que nuestro plano de existencia fuera invadido por unos seres que vienen de otro plano? – El rey asintió clamada y pausadamente. –Lo siento majestad por ser tan franco, pero usted ha perdido tres o cuatro tuercas en su cabeza.-

El rey se hecho a reír provocando la incertidumbre en Saskian. –Puede ser, pero no me dirás que el círculo de ancianos no se esperara que alguien se adentre en sus prisiones y saque al más peligroso, aunque inofensivo, criminal que hemos tenido sobre la faz de la tierra- Sasakian se sereno un poco y volvió a tomar a asiento.

-Saskian, ¿quién mejor que el que abrió la puerta para decirnos como cerrarla? Es mas ¿no crees que sería un triunfo para aquellos que no estamos convencidos de las formas del círculo de ancianos para darles un buen revés y dejarlos en ridículo?-

Saskian que seguían escuchando al rey con gesto ceñudo le gustó la idea de poner en evidencia a aquellos que se consideraban la elite. – Bien, pero antes quiero que me conteste a una pregunta, ¿qué me esperara a mí sí me descubren o si se enteran de que he sido yo el que ayudo a escapar a un preso? ¿Es más de con cuanta ayuda  o recursos contare?
-La segunda pregunta es fácil, tendrás, de que aceptes, que dirigirte a Crucetroncos donde estará esperándote un mago itinerante que no tiene afiliación con el círculo. En cuanto a recursos los que pueda proporcionaros a través de mi red de informadores que se extiende a lo largo y ancho del continente. El problema vendría si te capturan, por mucho que digas que vas de mi parte o de algún órgano oficial, se negara dicha acusación y lo más seguro que se te condene-.

Saskian se meso la negra melena reflexionando en lo que podría obtener si tuviera éxito y lo que podría perder de fracasar. -Está bien de momento tengo solo una condición, si veo que vuestro mago itinerante no me sirve de mucho no pasare por Crucetroncos, si me descubren, prepárese para darme cobijo o ayuda clandestinamente, sino ya sabrá lo que pasa con aquellos que me dan la espalda, y en caso de que me capturen…- No continuo sino que hizo un gesto bien claro de lo que pasaría si era capturado.

Y de repente volvió a la realidad ya que la guardia de Crucetroncos se alzaba a menos de una legua desde donde se encontraba. Así que refreno a su purasangre del norte para que cuando llegara a la altura de la guardia no tuviera que realizar una frenada de emergencia.

Una vez en la entrada, no tuvo mucho problema por pasar, ya que Crucetroncos estaba acostumbrada a todo tipo de viajeros, mientras tuvieran una bolsa que gastar o mercancías que vender, y la guardia solo era un mero simbolismo para que bandidos u otros seres menos racionales se lo pensaran dos veces antes de atacar la población.

Saskian entro en la ciudad y se dedicó a buscar la trufa verde, la posada donde contactaría con el mago itinerante. Tras dos horas buscando la dichosa posada, y hastiado de la población, se adentró en uno de los callejones que estaban deshabitados y se sentó cerca de una puerta. Estando allí sentado tranquilo la puerta se abrió y un tabernero con mandil de cuero negro y una camisa de borlas salió.

-¿Descansando del ajetreo? – Saskian miro al hombre y asintió – ¿y porque no pasa a la taberna mi buen amigo? –Saskian miro al tabernero con suspicacia – ¿qué taberna? Yo solo veo una puerta, nada más,- el tabernero se apresuró a contestar. – Claro mi buen señor, la entrada está a la vuelta del callejón, si sale de frente –le hizo una seña en la dirección contraria a la que entro Saskian,- y gira podrá ver la entrada principal y además unos establos para su magnífica montura.

Saskian asintió al tabernero y fue en la dirección que le indico, y a la vuelta del callejo vio el letrero de la trufa verde, lo que le gratifico y tras dejas a su montura en los establos entro en el establecimiento.

No estaba muy concurrido debido a que aún faltaba mínimo una hora para que la gente cerrara los comercios y los guardias cambiaran de turno, pero aun así había unos cuatro personas distribuidas en distintas zonas del local. Una sentada a una mesa y tres a lo largo de la barra.

Saskian que tomo asiento en otra mesa libre pidió al tabernero que nada más verlo por la puerta se acercó a él para tomar nota, un poco de comida y algo para refrescar el gaznate seco por el polvo.

Tras ser servido pocos minutos después Saskian pregunto por el nombre que el rey le dio, y el tabernero asintió en señal de reconocimiento. –Suele venir por estas horas señor, si desea  cuando le vea le diré que está buscándolo. – Saskian asintió complacido y dio una propina de varios cobres al tabernero por el servicio.

Saskian estaba terminando de comer cuando una mujer con ropa de hombre entro por la puerta y se dirigió a la barra. Pidió una pinta de cerveza negra enana, y tras intercambiar tres frases con el tabernero se dirigió a la mesa de Saskian.

-Me han dicho que preguntas por mí, así que dime quien te manda y veremos qué podemos hacer.- Saskian que estaba algo acomplejado ante la seguridad de la mujer y de que era una mujer, tardo unos segundos en reaccionar. El rey nunca le dijo el género de su ayudante, pero dio por hecho que era un hombre, así que ante la nueva situación se sobrepuso como pudo y empezó a hablar.

-Me manda el rey, mi misión solo será revelada cuando me cerciore de que cumplirás con lo estipulado. –Miro a la mujer a los ojos y en ese momento se dio cuenta de que tenía un claro parecido con el rey sobre todo en sus ojos verdes. –Así que por fin se ha decido a actuar este padre loco mío- . Saskian ya no solo estaba incomodo sino que un poco más y se cae desmayado delante de la hija del rey de los kotos.

Esta vez sí que tardo más de la cuenta en recuperarse de la impresión. – Veo que mi padre no te dijo nada de mí, siempre hace lo mismo, porque sabe que me divierte ver cómo se comportan los que envía a verme. – Saskian ya recompuesto replico –Pues no es agradable que se rían de uno, y es mejor estar informado de con quien me voy a encontrar-.

-Bueno estas ahora dispuesto a continuar con la misión o no soy lo suficientemente, como lo dijiste, que si el mago itinerante no sirve de mucho… – Saskian la paro en seco- Está bien, está bien, veo que el rey no solo me expone a mi sino también a su propia hija-.

La princesa rio pícaramente ante el arranque de mal humor de Saskian. – Bueno mañana a primera hora partiremos, coge una habitación aquí y mañana saldremos desde aquí-. Saskian asintió no sin antes exponer una de sus preocupaciones – ¿Cómo planearemos el asunto? – La princesa hizo un ademán con la mano para que no se preocupara de esas inmundicias- Ya lo planearemos en el camino, que hasta nuestro destino aún queda mucho por delante-.

Así la princesa subió a la habitación que tenía reservada en la trufa verde y Saskian se quedó estupefacto por la poca intención de planificación de la princesa, además de ver que el desastre se avecinada a pasos agigantados.

lunes, 19 de mayo de 2014

La era oscura III



Tras una semana desde que se decido que hacer y cómo hacerlo no se tenían expectativas de que esto se pusiera en marcha, pues el que debía dirigir al grupo que se adentraría en la ciudad ocupada por los nocturnos aún no había dado señales de vida y el consejo empezaba a impacientarse.

-Capitán, ¿aún no hay contacto? – El capitán de la guardia como había hecho las otras tantas veces que le habían preguntada dio la misma respuesta. – No señor, y es extraño siempre da señales  a los tres días de la llama, solo queda esperar el tiempo de rigor, que son dos semanas y si aun así no aparece podemos darlo por muerto.

El consejero asintió, -esperaremos una semana más, sino elegiremos a otro para que ocupe su lugar y pongamos en marcha la misión, no podemos demorarnos mucho más, los ataques de nocturnos esta menguando pero son cada vez más fuertes, creo que se están reagrupando para atacar con todo lo que tienen-.

Al décimo tercer día, por fin tuvieron noticias del joven mestizo, pues había estado más lejos de lo que esperaban en Ligthstrider. –Señores hemos contactado, Raven está de camino hacia Ligthstrider tardará tres días, y dice que tiene noticias – Los del consejo asintieron y dieron las gracias al capitán por su prontitud en el informe de las nuevas novedades.

Todo Ligthstrider está impaciente por ver de nuevo a Raven o por conocerlo, pues en cinco años habían llegado muchos de fuera, y si eran ciertos los rumores que circulaban sobre él, se podía decir que era un ser más nocturno que diurno.

Pero muchos se quedaron con las ganas, pues Raven no se dejaba ver e intentaba tener el menor contacto con los habitantes de Ligthstrider pues sabía que no estaría mucho por allí, y contra menos distracciones tuviera más rápido podría largarse de allí y seguir recorriendo los bosques y parajes que ahora eran domino de los nocturnos.

-Veo que el viejo Sandellyn ha dejado su asiento vacío- Fue la primera frase que dijo Raven al presentarse ante el consejo - Si, fue sustituido el año siguiente a tu partida, su salud estaba empeorando, y decidimos que tomara su asiento alguien más joven mientras él se recuperaba, pues como sabrás los elfos sufrieron mucho con la ocultación del sol.-

-Bueno dejémonos de sentimentalismos, estamos aquí para algo importante y creo que tienes cierta información que nos vendría bien – el tono del elfo era neutro pero por su expresión destilaba desprecio y rencor contra Raven.

Raven miro con un brillo burlón en los ojos al elfo pues estaba acostumbrado a ser el centro de toda ira cuando había elfos en donde se encontraba, por ello sabia como enfadar con su actitud al elfo y con ello divertirse. – Bueno la información que traigo es más bien un objeto que traigo, hace dos años más o menos, me hice pasar por un mestizo de elfo oscuro, pues mi piel como podéis ver es más tostada de lo normal y me adentre en una ciudad nocturna.

>>Una vez dentro conocí a varios de aquellos seres que la habitaban, se nota que había sido reconstruida porque todavía quedaban signos y símbolos que denotaban que aquella ciudad era de los elfos del bosque. Como para aquellos seres un elfo oscuro es un ser respetable y temido a la vezpor lo que me dejaron tranquilo en cuanto se corrió la voz de que había por allí uno de ellos, por lo que pude recorrer la ciudad sin molestias.

Al entrar en un edificio que tenía la pinta de ser un templo lo encontré intacto, pues parecía que el dios blanco aún mantenía su influencia en el, y los nocturnos no eran capaces de atravesar el umbral por lo que lo dejaron como lo encontraron. Dentro del templo, tras echar una ojeada, vi un objeto un tanto peculiar, así que lo cogí y me lo lleve de la ciudad y lo escondí en otro lado.

Este objeto en concreto se notaba que era mágico, pues como por mis venas corre sangre elfa sentí aquella afinidad que sienten los elfos con mucha intensidad por lo que supuse que era un objeto de gran valor.

Los tres años siguientes solo he estado buscando información por aquellos lugares donde iba, y de los diurnos que ayudaba a llegar aquí>>.

Raven fue detenido repentinamente en su relato – ¿Dónde guardas ese objeto que dices? – En una cueva a 100 kilómetros de aquí, y para su seguridad está consagrada, pues en mis continuos contactos con diurnos conocí a un sacerdote que me explico que aquel objeto era una reliquia de Ataraum III y que en él había un poder inimaginable, así que le pedí que consagrara la cueva para que solo pudieran acceder a ella seguidores de dioses benignos-.

El enano en cuyos ojos se podía ver la codicia fue más allá que el humano ¿Cómo es el objeto? – Raven algo extrañado por la pregunta, aunque no era cuestión de estar indagando describió el objeto muy detalladamente- Es una especie de pilar en miniatura, su base es dorada y por sus cuatro lados hay escrito en plata y en un idioma sagrado algo que no he sido capaz de descifrar-.

Los cuatro consejeros se lanzaron de sus asientos para cercar a Raven con sus ojos y semblantes ansiosos y esperanzados. – Sabia que llegaría el día en que no podría darte las gracias como se merece, pues Raven acabas de solventar el problema que te íbamos a encargar que solucionases-.

Raven ignorante y extrañado por todo lo que había pasado ese último minuto espero a que se explicasen los consejeros. Una vez después de la larga explicación Raven tomo sus bártulos y seguido por dos de sus amigos de confianza fue a buscar aquel artilugio que había dejado tres años atrás en aquella cueva.

El único peligro que se podría cernir sobre ellos, era la inminente avalancha de nocturnos que se disponían a atacar Ligthstrider pero no durarían mucho pues Raven junto con sus dos camaradas, recorrieron los doscientos kilómetros, cien de ida y cien de vuelta, en menos de una semana, y fue entonces cuando los sacerdotes y magos empezaron los preparativos para hacer funcionar el artefacto.

Pero no lo harían a tiempo, o por lo menos no tan a tiempo para no sufrir el ataque pero dio lo mismo, en ese ataque todo Ligthstrider defendió con uñas y dientes lo suyo, y muchos cayeron pero fueron más los que se salvarían y vivirían de nuevo libres por cualquier territorio, pues la luz del solo después de un siglo de ausencia volvía a brillar al tercer día de contienda y los nocturnos ante el dolor que les insuflaba corrieron raudos hacia sus antiguos escondites y de nuevo el equilibrio había sido restablecido y todo gracias a un ser por el que corría en equilibrio la sangre de dos razas diferentes.

domingo, 11 de mayo de 2014

El Guardian III



El asunto había tomado un cariz peligroso sobre todo para mí, ya que si yo había dado con el lugar los que contactaron con esta raza también lo harían, así que inste a Coyote bailando y a Lobo gris que me ayudaran a trasladar a Grum fuera de la reserva para llevarlo con Phil y sus dos secuaces.

Lo primero que hicimos fue “camuflar” a Grum y a continuación volvimos a la frontera de la reserva. Fue lo suficientemente rápido, pues tras llegar a la frontera Wen rápidamente nos llevó a una garita para comentarnos las últimas novedades.

-Tío tienes una flor en el culo más grande de la que jamás he visto. Hace escasamente una hora me ha llegado un rumor sobre un escuadrón de guardianes que han entrado en la reserva por la entrada oeste.- Parece ser que los ghosion se habían puesto en marcha antes de lo que se previa – No es suerte Perro, sino más bien conocimiento y experiencia, y sé que la rapidez y la experiencia en este tipo de casos salvan a muchos.

Tras una rápida despedida, seguí mis instintos y me presente en uno de mis muchos pisos francos adquiridos gracias a mi sueldo de Guardián y que solo yo conocía. El más cercano a la reserva y por consiguiente en el que más sospechas daría lo descarte, por lo que una vez montando en mi coche salí dirección noreste al barrio residencial.

Allí no se extrañarían de mi visita y menos de que fuera acompañando ya que muchos de los vecinos sabían quién era y para que usaba esa casa. Es más en el barrio era apodado “el muchas”, pues siempre que iba allí era acompañado de mujeres, debido a que mi trabajo requería que usara ese tipo de casa sobre todo para las entrevistas con mujeres de alta alcurnia que solicitaban trabajos de seguimiento o de obtención de fármacos que de otra forma no podrían adquirir.

El krots tras explicarle los hechos de camino quedo algo consternado, porque ellos los krots habían pensado entrar en los guardianes y por ello habían hecho ese viaje, pero por temor a contraria a sus protectores los ghosions habían estado aguantando, y ante las constantes oposiciones con sutiles escusas se habían cansado y por ello habían decidido ir a la tierra para hacerlo oficial y que fueran los propios guardianes y no los guardianes ghosions los que les dijeran los prejuicios que los ghosions les habían comentado.

-Pero me estas contando que los krots hemos sido engañados por los ghosions, y eso es muy improbable, vale que hayan sido muy cautos para nuestro gusto, pero ¿Qué motivos van a tener para que nos unamos a ellos en vez de a los guardianes?-

Ahí estaba el quid de la cuestión, los ghosions habían sido adheridos a los guardianes después de muchos años de constantes conflictos entre los guardianes y ellos, y solo tras casi llegar a la extinción habían accedido a unirse y forma parte. Pero siempre había sectores que aún se oponían y que preferían la extinción a ser miembros de una organización que para ellos eran como máximo animales.

-Pues no sé qué decirte amigo, solo que puede que seáis, entre comillas, el punto de inicio de una catástrofe, que espero que los Guardianes sepan llevar bien y no se les vaya de las manos. Pero no te preocupes, estas en buenas manos, y a donde vamos te presentare a altos cargos de los Guardianes-.

Por fin llegamos a mi casa franca, donde Phil, los negros y la alférez de ojos de hielo, ya estaban allí, así que no me quedaba más remedio que después de aquello tocaría vender la casa, pues su localización ya había sido puesta al descubierto, y por mucho que tal, no me serviría de nada.

Tras entrar en la casa precedido del krots, me siguieron Phil, la alférez y el negro que se había reunido conmigo dos días antes en mi despacho. – Buen despliegue el vuestro, ahora me tocara vender la casa, pues su anonimato ya es público – intente romper un poco el hielo para que el ambiente no fuera tan tenso para nuestro amigo Grum, pero parece que no resulto como yo esperaba.

Así que los hice pasar al salón donde nos sentamos a una mesa de comer amplia, el krots y yo en un extremo los tres oficiales de los guardianes en el otro. – Veo que siguen en plena forma capitán, y has hecho un trabajo esplendido pero que puede provocar un problema mayor. – Mire inquisitivamente al sargento de los negros y no a Phil que era el que más rango tenía en la sala en aquel momento, pero aun así yo seguí con el juego al sargento.

-Para eso me pagan sargento, para que haga los trabajos rápidos y de forma concienzuda.- por debajo de la mesa había muchos más juegos que por encima, pues yo advertí a Grum que estuviera listo para agacharse y resguardarse en cuanto se lo dijera. – Pero cuando eras Guardián no eras tan diligente con las órdenes.-

Yo seguía con el juego del sargento, mientras miraba alternativamente a la alférez y al coronel, la primera con sus ojos y semblante de hielo no transmitía nada, por lo que no sabía si estaba del lado del sargento o no, y el coronel Phil, era un mar de furia pero que era contenido por un dique que presuponía que era algún tipo de arma.

-Sargento, dejémonos de juegos y tiras y aflojas, quieres a mi amigo para llevártelo con tus camaradas ghosions, y para ello te llevaras por delante a los que estamos aquí presentes, pero como sabes yo cobro por trabajos, y si me pagas la otra parte, el trabajo estará concluido y entregare el informe al que paga, pues el que paga es el que alquila mis servicios, así que ¿porque no te lo llevas y dejas el dinero? – el sargento de infantería empezó a sopesar la idea de realizar un intercambio sin muerte, sabía que estaba condenado, pero que si le llevaba a Grum a los goshions estaría a salvo, pero no sabía que yo era más listo que él, y tras ver sus dudas en los ojos, di la señal a Grum y este con la agilidad de un felino se escondió, y yo saque mi pistola de debajo de la mesa realizando dos certeros disparos, pues era otro de los muchos regalos que me hizo la instrucción, uno en el pecho y otro entre ceja y ceja.

En ese mismo instante entraron los centinelas, que por suerte para todos los de la mesa eran subordinados de la alférez la cual por primera vez en las dos reuniones había dado muestras de ser humano, pues un rictus de asco y horror estaba presente en su cara.

Ayude a levantar a Phil el cual había caído de la silla por el impulso del sargento, y después fui a comprobar el estado de Grum, el cual estaba bien. Y aun con la pistola en la mano tuve el suficiente cinismo para preguntar - ¿bueno alguno más es aliado o simpatiza con la causa ghosion?-

Phil y la alférez llamada Katrina, se relajaron, y eso me dio la prueba de que la alférez estaba del lado de Phil.

-Bueno Grum cuéntales todo lo que nos contaste a mí, a Coyote bailando y a Lobo gris- Grum relato todo desde el principio, de forma muy metódica y clara para que no hubiera ningún tipo de conjetura ni duda para sus oyentes. –Bueno Phil, aquí tenéis la prueba de que por lo menos hay una parte de los ghosions que aún nos… os tienen manía, así que por mí el trabajo como dije antes está acabado cuando me paguéis.-

Phil y Katrina asintieron a mi comentario, y como no, me pagaron, pero no quedo así la cosa, pues como miembros de los Guardianes y además con gran influencia en todos los gobiernos de los planetas que formaban estos, tenían la potestad de alistar por ley a civiles y antiguos guardianes que ellos consideraran aptos para ellos, y por ende tras pagarme el sueldo que habíamos acordado por el trabajo, también me pagaron con una carta de alistamiento.

Y eso me hizo volver a mi antiguo rango de capitán, pero con la diferencia de que no volvería a mi antiguo puesto con la infantería, sino que estaría en un nuevo escuadrón secreto y que Katrina estaría a mis órdenes junto con tres individuos más, mientras que  yo rendiría cuentas a Phil, que sería el oficial al cargo de la unidad.

Pero no quería que ellos se salieran con la suya y como jefe directo de la nueva unidad tenía la misma potestad que Phil para reclutar a civiles o antiguos Guardianes, así que Grum desde aquel momento pasó a formar parte de mi escuadrón.

Pero no todo era tan simple, pues mis nuevas obligaciones me darían muchos más quebraderos de cabeza de lo que esperaba pero al fin de cuentas ya lo dije, yo era un guardián de facto, pero sin pertenecer a ellos, ahora vuelvo a ser un guardián y ello puede que dure o no dure, pero por lo menos haré lo que siempre he hecho.