jueves, 29 de agosto de 2013

Asesinos espaciales



Habian pasado más de 1000 años desde que el hombre piso por tercera vez la luna. Desde aquel  momento al igual que paso en la edad de los conquistadores, la humanidad se fue expandiendo por el espacio.

Hasta el momento han encontrado tres planetas con sus respectivas formas de vida, tanto inteligente como no. Esto fue un gran hallazgo, ya que al igual que la humanidad las formas de vida inteligente se hacían la misma pregunta que ellos “¿estamos solos en el universo?”

Por ello la toma de contacto y las posibles relaciones entre las razas, fue pacífica y abierta y tanto en la tierra como en los planetas visitados se establecieron individuos de los tres  planetas hasta el momento descubiertos, posibilitando la interacción y evolución tecnológica de ellos y de los humanos.

Los años pasaban y aunque algún que otro conflicto se producía entre las diferentes razas, la paz y la armonía brillaban siempre. Pero como se suele decir todo llega a su fin, y a finales del año 3999 un nuevo planeta con muchas posibilidades de albergar vida fue localizado.

A la sombra de una luna gaseosa se localizaba dicho planeta. Los grakus habían sido los que había descubierto dicho planeta ya que el suyo  era el más cercano.

Ante tal evento la mancomunidad envió una de las naves de la mancomunidad llamada Explorer o lo que viene siendo en el idioma grak, granku lorp gandrejitiob, que traducido al idioma humano seria la “verdad es grandiosa”.

El primer día de negociación fue muy fructífero,  y a diferencia de las negociaciones llevadas a cabo con los prundas, que duraron seis meses humanos,  en menos de una semana los phan ya eran acogidos en la mancomunidad y empezaron a formar parte de ella.

Pero los elrak raza que había sido la primera en contactar con los humanos y viceversa, tenía muchas dudas con respecto a los phan, ya que aquellos seres etéreos que se valían de seres con una inteligencia básica para la supervivencia y sospechaban de que escondían más de lo que aparentaban, por ellos juntos con los grakus propusieron la creación de un grupo de seguridad llamado USIRM, unidad de seguridad interracial de la mancomunidad.

Y junto con la nueva “policía espacial” como la denominaban los humanos se crearon las primeras leyes globales de la mancomunidad para asegurar una convivencia pacífica y evitarse ningún sobresalto.

Y gracias a este grupo especial que en menos de un año ya constituía una fuerza de seguridad importante con sedes en los cuatro planetas y que estaba compuesta por miembros de todas las razas, los delitos interraciales habían caído un veinte por ciento, y se habían destapado grandes redes criminales que operaban gracias a la falta de estas leyes.

Pero el gran caso que daría su fama a la USIRM estaría por venir y cambiaria las cosas para siempre en la mancomunidad. Pero aun así los días transcurrían tranquilos y en calma hasta los primeros incidentes.

El día se presentaba formidable en Elrar’le, planeta de los elrak, y así fue, el simple hecho de que aquellos individuos fueran vegetarianos y amanerados como los consideraban los grakus, hacía que su planeta fuera más brillante y limpio que los demás. Sus vistas y cuidados dejan muy abajo al resto de planetas por eso James Tomas Klaus nacido en las naciones unidas de la tierra, había pedido destino allí.

Desde que se contactó con los elrak, J.T se apasiono por aquellas criaturas tan idénticas a los humanos pero más perfectas a que ellos. Aun así como en todos los planetas también había habitantes de otras razas y los fornidos y salvajes grakus con sus rudos modales pero de lealtad indiscutible también tenían allí su pequeña participación al igual que los prudos con su piel gris y sus curiosos intelectos.

Los únicos que no había allí eran los phan, que aunque habían sido recientemente admitidos, solo se habían establecido en la tierra y porque tenían que tener una representación constante in situ para no tener que esperar meses hasta que una comitiva de cualquiera llegara para consultar los asuntos relativos a la mancomunidad.

J.T y su compañero graku, Marr Hark o más conocido como M, habían sido llamados cuando el ocaso estaba casi en su final, debido a un incidente que se había producido entre un ciudadano elrak y un humano.

Cuando ambos llegaron las autoridades elrak, habían acordonado la zona, ya que no sabían que hacer más para tratar con lo que estaba sucediendo allí.
Cuando J.T y M llegaron allí también se sorprendieron al encontrarse los dos cuerpos rajados y cubiertos de sangre.  J.T que era uno de los investigadores del USIRM, tuvo algún reparo en lo que veía pero se sobre puso con rapidez, no fue el caso de M el cual acostumbrado en su planeta a los duelos por honor, los crímenes pasionales y los ajustes de cuentas, estaba más curtido en aquel aspecto.

J.T y M revisaron los cuerpos hicieron preguntas a los primeros oficiales de seguridad elrak, y recogieron las pruebas pertinentes para ver si podían darles una explicación coherente, mientras tanto esperarían a las autopsias para que dieran la causa de la muerte.

-Señores, la autopsia del ciudadano elrak tendrá que esperar los tres días de rigor estipulado por las leyes elrak y acordado como un asunto racial en el CSM, y al igual que está estipulado en el apartado cinco sección ocho, párrafo doce de la carta de derechos y deberes de los ciudadanos de la mancomunidad, esta autopsia será llevada a cabo por un elrak, ¿la del humano también? – Pregunto el oficial al mando de los elrak. – Si, también, pero la del humano como pone estipulado en el apartado cinco sección siete párrafo once, tendrá que ser inmediatamente ya que tenemos separados como bien dice el artículo las muertes fortuitas de las naturales, y como se trata de una muerte fortuita la ley obliga a realizar la autopsia en un máximo de veinticuatro horas.

El oficial elrak apunto todo en su tableta y dio las órdenes pertinentes. – Cuando el informe de la autopsia esté listo, les avisaremos y  podrán pasarse por la morgue. – J.T y M asintieron, y tras despedirse oficialmente se dirigieron a la sede de la USIRM de Elrar’le.

Una vez en la sede, abrieron el caso y empezaron a procesar las pruebas en el departamento científico de la sede.

Oye J.T ¿porque no vamos a almorzar hasta que nos digan algo?- J.T asintió a M y salieron a un bar de enfrente que preparaban el mejor cacuerto de todo Elrar’le-.

Si algo hay que alabar de estos mariquitas es que hacen ese cacuerto de muerte, y mira que a mí me gusta la carne, pero este con el tofu ese como lo llamáis vosotros y que exportáis a todos lados no se queda atrás.

J.T sonrió a Marr, mientras degustaba su comida. –Oye M como es eso de los asesinatos en tu planeta, ya que en el mío hace mucho tiempo que no nos asesinamos los unos a los otros.

Pues igual que la mayoría de los vuestros del siglo veinte y principios del veintiuno, la mayoría son por ajuste de cuentas entre bandas rivales o clanes, mientras que los otros por cuernos. – Mientras hablaba sonreía y mordía su cacuerto-.

Mientras tanto comían  y hablaban de los asesinatos humanos del siglo XX y XXI les sonó el intercomunicador,  así que terminaron con la comida y se fueron directos a la morgue.

Una vez allí el forense les explico lo que había encontrado en el cuerpo del humano.

-La muerte fue causada por las heridas de arma blanca como era de esperar,  pero los análisis han dado niveles altos en endorfinas,  adrenalina, dopamina, serotonina, etc., y negativo en todo tipo de drogas conocidas hasta la fecha.- Ambos investigadores se quedaron mirando al forense para que les diera una explicación un poco más detallada si es que la tenía.

-De momento es todo lo que puedo decir, además de que es la primera vez que veo esto. Tendremos que esperar hasta que se haga la autopsia del individuo están.- Sentencio el forense.

Los dos investigadores recibieron el informe del forense en sus tabletas y se dirigieron de nuevo a la escena del crimen a ver si se les había pasado algo. Mientras tanto J.T envió el informe del forense elrak a un forense humano de loa USIRM para que explicara los elevados índices de dopamina, adrenalina y serotonina, y endorfinas.

Tras una hora por el tráfico los dos llegaron al escenario del crimen, y como era de esperar no encontraron nada nuevo de lo que tenían en su poder los de USIRM.

Así que no les quedó más remedio que esperar a la autopsia del elrak y rezar, si es que rezaban, para que diera algo de luz al asunto. Mientras esperaban la respuesta del forense humano llego a la tableta de J. T que compartio con Marr.

-Parece ser que esas sustancias se dan a la hora de realizar cierto tipos de esfuerzo o ejercicio, pero esto no nos dice nada, porque si como se presupone se mataron entre ellos, es normal estos niveles.- Puntualizo el graku.
Al cuarto día, como era costumbre entre los elrak, el forense elrak hizo la autopsia. Y a parte de las heridas producidas por arma blanca como el humano, también se dieron altos niveles de serotonina, dopamina, endorfinas.

-Señores creo que hemos dado con un punto de inflexión, alguno de ustedes puede decir que hacen la serotonina, dopamina y endorfina en un cuerpo elrak?- el forense hizo la pregunta de forma retorica ya que presuponía que ninguno de los dos iba a saber contestarla pero J.T sí que lo hizo-

-Realmente esas sustancias en un cuerpo elrak, nos indican que fue drogado porque son muy adictivas en los de vuestra raza y por ello vuestro cuerpo solo crea o produce un 0.0001% con respecto a los humanos, y si dice que tiene los mismos niveles que el cuerpo del humano, podemos decir que estaba drogado.-

Tanto Marr como el forense se quedaron un poco sorprendidos ante la magistral explicación de J.T.

-Eso es, pero aún queda lo mejor. –Empezó a revolver el forense los papeles hasta que encontró un lupa- Si miráis aquí, -puso la lupa en los orificios nasales del elrak- no veréis nada, por lo tanto al no ser inspirado por la nariz la droga, solo puede haber una forma de introducirla en el cuerpo, elrak sin que se note demasiado, por que como sabemos los elrak que se drogan por ingestión oral, acaban con ampollas en la boca, por lo tanto busque pinchazos y no he encontrado ninguno.

La sala de autopsias se quedó en silencio durante unos minutos. –Yo no creo que saquemos más de aquí –empezó a comentar el forense- he realizado dos veces todas las pruebas en ambos cuerpos me dan los mismos resultados las dos veces, así que el asunto está claro, quien drogara a uno hizo lo propio con el otro y se mataron entre los dos-.

Ambos investigadores se despidieron del forense, y se dirigieron a la sede de la USIRM a ver por donde podían coger el asunto.

Dos días después fueron llamados de nuevo, esta vez los muertos eran un graku y un prudo, y dos días después volvió a aparecer un cadáver humano y uno graku. Los seis cadáveres encontrados con una diferencia de dos días presentaban los mismos síntomas y las autopsias revelaban lo mismo que con los dos primeros.

M creo que estamos ante un asesino en serie, –Marr se quedó mirándolo como si hablara una lengua desconocida -sí, no te acuerdas de la charla de hace ocho días de los asesinatos humanos del siglo XX y XXI, pues me puse al tema y empecé a leer, y vi que en aquellas épocas había asesinatos múltiples que seguían un mismo patrón y eran obra de uno mismo individuo.

Marr le insto a que le dijera más cosas sobre esos asesinos en serie.

-Suelen ser perturbados mentales, o con alguna enfermedad mental como  la sociópata o la un psicopatía, esquizofrenia, etc., que no siente ningún remordimiento al arrebatar la vida a otro u oyen voces que les dicen que hacer. Según su nivel de cultura pueden ser más sofisticados o menos, pero todos tienen la misma mecánica, eligen a sus víctimas por algún rasgo, motivo, raza, credo etc., y acaban con ellos-.

Los dos se quedaron mirándose durante unos segundos hasta que J.T continúo.

Había un apartado especial sobre estos individuos –continuo J.T- en el decían que había una clase de asesino en serie que era el más difícil de localizar, ya que no se regía por ningún patrón en común, sino que asesinaba por mero placer, y le daba lo mismo si eran mujeres u hombres, de la misma raza o religión o diferentes.

En ese momento Marr callo en lo que J.T quería decir- ¿Me estás diciendo que estamos ante un caso en el que el asesino no se rige por ningún tipo de norma, o patrón? – J.T asintió a su compañero graku-

Marr suspiro de frustración ante tales acontecimientos y ante la perspectiva que ambos tenían por delante.

Lo único que hacían los policías de aquella época era seguir los pasos, y siempre lograban atrapar al asesino porque se descuidó en alguno de los asesinatos que había cometido.

Marr y J.T no veían muy claro el futuro, y solo les quedo esperar a que se produjera ese descuido que les llevara ante la verdad de aquellos hechos.

sábado, 10 de agosto de 2013

Magh



En un mundo donde la tecnología, la ciencia y la razón son el claro predominante, la humanidad ha llegado o eso creen casi todos al culmen de la civilización, una civilización que por más que se quiera solo puede evolucionar conforme evolucionen las maquinas.  Esta maquinas han hecho posible que el ser humano alcance una meta, comprendan todo lo que los rodea, y expliquen lo necesario para saber cómo el mundo funciona, pero aún no han logrado explicar lo más simple que posee el ser humano, su cerebro.

Como antiguamente el ser humano solo ha conseguido llegar a usar un diez por ciento del cerebro. Pero la pregunta es clara, como solo usando ese diez por ciento como el ser humano ha podido llegar donde ha llegado.

Simple, porque como en todo siempre habrá unos pocos que superen ese diez por ciento y consigan perdurar en la historia. Pero no solo por eso se perdura en la historia, porque hay quien no es superior a la media y está impreso en ese marco.

Pero tras eones en los que la humanidad ha ido avanzando pasito a pasito, aún no han dado el gran paso que deberían haber dado hacía mucho tiempo atrás. Están estancados en sus rutinas y eso es lo que ha ocasionado este desastre.

El sol estuvo a punto de agotarse, pero los humanos en su afán de supervivencia consiguieron encontrar otros lugares donde alojarse hasta que sus brillantes científicos encontraran la solución, y así lo hicieron, crearon el mayor artefacto de destrucción masiva que la tierra jamás albergo y jamás albergaría.

La funcionalidad de ese artefacto era simple, estallar en el sol y provocar una mini supernova que reactivaría a este y volvería a ser una estrella joven que durase miles y miles de años hasta que volviera a consumirse.

Los test, las pruebas y simulacros decían siempre lo mismo, que aquel artefacto haría su función sin dañar nada que no estuviera a una distancia de cincuenta mil kilómetros del sol.

Y convencidos de tal hecho lanzaron el artefacto llamado Renascentia el cual como su nombre indicaba seria el causante del renacimiento del sol. Pero como siempre pasa, las cosas no van como uno quiere, y como todo artefacto tiene sus imperfecciones.

La del Renascentia era su carga con partículas de luminicas, las cuales provocarían una mini supernova en el sol que lo recargaría como si de una pila se tratase. Pero no previeron que la radiación solar provocada por la explosión llegaría hasta la tierra convirtiéndola en lo que lo hizo, un planeta medio desolado donde la vida escaseo durante decenios, hasta que la radiación termino, obligando a los supervivientes menos desfavorables  a vivir bajo tierra y los más favorables a abandonarla para ir a alguna estación o planeta colonia mientras pudieran volver a la tierra.

Aun si la humanidad sobrevivió al hecho que la historia llamaría el renacimiento, porque los que se quedaron en ella, consiguieron algo que durante eones nadie había logrado, usar más del diez por ciento del cerebro gracias a las radiaciones solares que provocaron que las ondas beta y ram-alta aumentaran el voltaje que transmitían por el cerebro activando zonas que de otro modo no se podrían activar.

Así la tierra volvió a prosperar con una humanidad más evolucionada donde cada humano poseía habilidades únicas a la persona.

Pero como siempre ha pasado a lo largo de la historia de la humanidad los que abandonaron el planeta regresaron encontrándose una tierra mejorada y más evolucionada de lo que ellos pensaban.

Entonces entro en escena la envidia y el medio, y los que abandonaron el planeta dejando a su suerte a los que no pudieron, reclamaron sus derechos con violencia y masacres.

Y así fue como los llamados normales recobraron el control de la tierra y los magh fueron confinados, estudiados y usados como armas contra los que atentaran con el nuevo orden establecido.

La tierra prospero más en un siglo de lo que había hecho en muchos eones, y esa prosperidad solo vino dada por las habilidades innatas de los magh, que en su estado habían logrado superar los confines del cerebro para que todo vivieran en armonía y cómodamente.

Esta prosperidad también llego a las colonias repartidas por todo el universo, y esto ayudo a contactar con nuevas especies mucho más evolucionadas que los humanos. Los primeros contactos fueron pacíficos y armónicos, ya que todas las especies habían llegado a un estado en el que la armonía y la paz era la base de sus sociedades y abrieron los brazos a la joven raza humana.

Así durante siglos de contactos la humanidad era una más de las razas integradas en el espacio, y como tal tenía un deber y una obligación, y por ello mantuvieron en secreto a sus congéneres más desarrollados, ya que hacía tiempo que tanto normales como magh habían llegado a la conclusión de que ambos eran hijos de la tierra y si querían tener ventaja, por si se encontraban con dificultades deben callarse.

Pero esta paz duro poco, al igual que había razas pacíficas y acogedoras había otras beligerantes que veían a la joven raza humana como una fuente de esclavos y carne para satisfacer sus necesidades.

Así que no tardaron mucho en atacar a los humanos  de las colonias y esclavizarlos para sus propósitos. La tierra ante tales hechos se mantuvo firme en no mostrar sus armas, así que aunque la armonía y paz habían reinado en esta durante decenios, no habían sido necios de no aumentar sus defensas por si algún hecho como el que estaba aconteciendo se producía.

Así que con sus máquinas fruto de una evolución constante, y sus artes de la guerra estudiadas desde los primeros hombres intentaron hacer frente a sus enemigos. La estrategia resulto e hizo retroceder a los atacantes pero no duro mucho el factor sorpresa, ya que las razas que los atacaban aprendían rápido las estrategias usadas y en poco menos de una década humana los superaban en casi todo.

Esto obligó al consejo terrícola hacer la pregunta que estaban temerosos de afrontar. Desde que se descubrieron los primeros magh, habían pasado ya varios milenios, y casi el noventa por ciento de la humanidad era magh ya que aún quedaban colonias en las que el mestizaje fue erradicado lo que hizo que esas colonias fueran las primeras en caer, sin embargo la tierra y las colonias que resistían contaban con que su población era del cien por cien magh.

Estas colonias habían aceptado que los magh eran el siguiente paso del hombre en su camino de conseguir la plenitud física y metal.
Así que la pregunta se formuló.
¿Es necesario que usemos nuestras habilidades?

La respuesta no tardó en llegar, ya que si querían sobrevivir, era necesario que los humanos mostraran su arma secreta. Esto provocó un temor muy arraizado en la humanidad, sobre todo de cara a sus aliados en las demás razas, pero era una necesidad más que un capricho, ya que sin ella no conseguirían sobrevivir a los ataques y sus atacantes se harían con más humanos.

Fue en la asamblea espacial de razas donde los humanos mostraron sus poderes a sus aliados, y al contrario de lo que habían pensado sus aliados acogieron aquel hecho como un rayo de esperanza haciendo que los humanos fueran a ahora su espada de Damocles.

En aquella asamblea se acordó que todos apoyarían las acciones humanas contra sus atacantes, proporcionarían ayuda y lo que fuera necesario para protegerse, porque sabían que aunque más avanzados también serían el objeto de estas razas cuando los humanos hubieran sucumbido.

Y así fue como la gran guerra dio comienzo y los humanos con sus habilidades lideraron el ataque contra sus enemigos haciendo que estos llegaran casi a la extinción y reconocieran la superioridad humana.

martes, 6 de agosto de 2013

Lo desconocido II



La fría camilla de metal calentada por el calor del cuerpo que la habitaba estaba en medio de la sala con una luz fluorescente iluminando el cuerpo que albergaba. Solo el leve ascenso y descenso del pecho en el acto de respirar daban la señal de vida.

Llevaba más de cuarenta y ocho horas tendió en aquella camilla y no mostraba signos de que la cosa cambiase. Pero lo hizo y los ojos se abrieron para seguidamente cerrarse de nuevo por la exposición del fluorescente que los había dañado.

Cuando estos se habituaron a los fluorescentes con rápidos parpadeos, el hombre se incorporó, dejando el esfuerzo a medio camino por la debilidad. Cuando su mente se acostumbró a la nueva situación el hombre se levantó de la camilla y observo lo que había al su alrededor y la sala donde se encontraba.

A todas luces era una sala médica, y el instrumental estaba por todos lados a simple vista, por lo que el hombro cogió uno de los bisturís de una de las repisas y se dirigió a la puerta ya que en la sala solo estaba él.

Tardo varios minutos hasta que dio con la forma de abrir la puerta metálica con una pequeña ventana de cristal.

Se asomó al pasillo para ver si había alguien, pero tras unos segundos mirando en ambas direcciones no se veía rastro de nadie. Avanzo por el pasillo atento a cualquier indicador de que podría ser descubierto.

En ambos lados del pasillo las puertas se colocaban a intervalos de cuatro metros de distancia una que otra, y todas con la misma estructura metálica y con una pequeña ventaba para ver dentro.

Tras recorrer casi todo el pasillo y ver que en las habitaciones no había nadie, llego hasta una puerta de metal completa, con un mecanismo parecido al que había en la habitación de la que había salido, por lo que no le llevo ni dos segundos abrir la puerta.

La siguiente sala a la que entro parecía una especie de entre sala, así que volvió a manipular el mecanismo de apertura y entro a lo que parecía la sala del puente.
Allí encontró a dos de sus compañeros de la tripulación del neo sentados, conversando con unas criaturas que tenían pinta de ser humano pero que por toda la cara le salían pequeñas protuberancias.

El ruido de la puerta hizo que tomara toda la atención de los allí presentes, sus compañeros le instaban a que se acercara para presentarse a sus salvadores, mientras que su cerebro le decía que anduviera con ojo que podría ocurrir cualquier cosa.

Lentamente se acercó, pero de repente sintió un contacto en su cuello y…

Despertó sobresaltado sobre la camilla de metal, miro a su alrededor, la piel aún conservaba el sudor frio de la pesadilla donde era asesinado.

La primera impresión de la sala era igual que la del sueño, pero con la salvedad que sus compañeros estaban en ella, tumbados sobre unas camillas metálicas como la suya.

Tras pasarse la mano por el pelo, su cerebro se había habituado a la nueva estancia y esta vez sí que estaba despierto,  se sentó al borde la camilla, en esto que la puerta se abrió.

En ese momento entraron en la sala dos enfermeras humanas, que se preocuparon por su estado y le tomaron diferentes mediciones. Tras el reconocimiento le dieron ropa y se vistió.

Fue acompañado al puente donde el Comandante Pulov le recibió con los brazos abiertos.

Bienvenido de nuevo Johansson, creíamos que tú y tu tripulación estabais muertos.

Johasson que lo miro extrañado, ya que hacía solo un mes que habían salido de la estación espacial, destino a la galaxia Neumerita.

¿Qué paso? ¿Cómo habéis llegado tan rápido a la galaxia Neumerita si hace solo un mes que hemos salido de la estación?  Es mas ¿no deberíamos estar ni siquiera en Neumerita, ya que son dos meses de viaje?
¿Un mes? Muchacho estas muy mal, hace más de dos años que salisteis de la estación, y hace dos años que conectasteis con la tierra, con un mensaje de que habíais encontrado un nuevo planeta, y os habían ayudado porque habíais sido arrastrados a una nebulosa.

Johansson se quedó en silencio durante minutos sin comprender lo que pasaba. Así que lo único que pudo decir era que no tenía ni idea de nada.

Es mas hace año y medio que la raza conocida como los norros se puso en contacto con nosotros ofreciendo un contacto amistoso en la galaxia Pegaso. ¿No me digas que no te acuerdas del comandante Jozan?

Johansson lo miro incrédulo ante lo que oía, era la primera vez o eso creía el, que oía el nombre de Jozan.

Pues él se acuerda de todos vosotros de cómo,  intercambiasteis información acerca de las dos razas y como a estos les agrado tanto lo que vieron, y que hacia siglos que no encontraban una raza nueva que se pusieron manos a la obra para conocernos y ayudarnos en nuestro avance.

Es más como gesto de buena voluntad arreglaron la Neo con su tecnología, y le añadieron algunas mejoras para que el viaje interespacial resultara más rápido, y ahora mismo estamos instalando las mejoras en todos nuestros transbordadores, pero con lo que estoy viendo tenemos que tener una reunión con Jozan y su gente antes de que pase la cosa a mayores.

A ti y a tus hombres se les ha asignado un ascenso, y estaréis en la reunión, así que ahora descansa y esperemos que os recuperéis cuanto antes.

Tras cinco días, todos los tripulantes de la Neo estaban en plenas facultades físicas y psíquicas, salvo la pequeña amnesia que todos tenían.

La reunión se hizo en la galaxia Pegaso en la estación espacial humana que había allí. Todos los invitados fueron llegando uno de tras de otro y fueron pasando a la sala.

Jozan, Mord, Sapark y Atbot que fueron por parte de los norros nada más ver a Johansson y a sus compañeros los abrazaron y les felicitaron por llegar sanos a la estación espacial. Pero Johansson y sus hombres extrañados se sentían incomodos ya que no recordaban a aquellos seres tan parecidos a los humanos pero con protuberancias en la cara.

Tras las presentaciones, cortesías y diplomacia entre ambos se sentaron a la mesa.

Comandante Jozan, tenemos un problema con los nuevos propulsores que nos ofrecieron como regalo. – Mord los miro con asombro- ¿De qué se trata?

Pues como ha podido ver Johansson y su tripulación han perdido dos años de memoria y no se acuerdan de nada de lo que hicieron cuando estuvieron en Neumerita.

Mord, Jozan, Spark y Atbot prorrumpieron en carcajadas ante las insólitas caras de los dirigentes y estado mayor de la tierra.

Tras cesar las risas, Jozan se sereno al igual que sus tres compañeros y les contaron lo que pasaba.

Me lo temía, a muchas razas a las que les hemos obsequiado con nuestra tecnología tienen este tipo de efectos secundarios. – El tono era un tono de que no pasaba nada-. Spark os explicara los detalles técnicos porque para cada raza hay que hacer unos ajustes en el flujo de energía que provee a los motores.

Spark empezó con la jerga técnica de como la fisiología, la composición y el aire que cada respira provocaba unos efectos u otros, y a los que respiraban oxigeno los problemas más comunes eran la falta de orientación, la pérdida de memoria, y en casos grabes como son los organismos con base silicea-carbonica la perdida de densidad ósea y reducción del tamaño.

En los humanos como su base era del setentao por ciento de agua y composición carbono, solo perdían la memoria.

Pero no es problema, tenemos lo necesario para desbloquear esos recuerdos, así que no nos preocupemos por el momento. – Comenzó diciendo Jozan- Os daremos las indicaciones de como regular los propulsores para que no os pase.

Todos los asistentes asintieron aliviados ante tales palabras.

Bien aparte de eso hemos venido también para haceros una propuesta, que creemos que nos beneficiara a todos. – Jozan saco un pergamino de uno de sus bolsillos interiores de su casaca de comandante y lo extendió en la mesa pasándoselo a los humanos.-

Esto es un contrato de adhesión a la alianza que ahora mismo formamos doce razas en distintos lugares del espacio esperemos que aceptéis la invitación – El gesto de todos los norros era apacible y amigable, no se veía en ellos ninguna intención oculta-.

Es un honor, pero como sabéis nosotros solo somos los meros intermediarios, los que deben decidir esto son los señores que se sientan a nuestra izquierda. –Señalo a todos los peces gordos de la tierra-

No creo que haya problema –empezó a hablar uno de ellos – lo revisaremos y en dos días tendrán nuestra contestación, y si quieren mientras tanto siéntanse libres de ser nuestros invitados y recorrer la estación Pegaso.

Los norros aceptaron encantados, ya que aparte de ser una raza pacifica eran también gente que le gustaba mucho la historia, creencias y diferentes culturas de otras razas.

Los dos días pasaron y en la estación Pegaso se firmó lo que sería el primer paso en la conquista del espacio para los humanos. Allí quedó plasmado el acuerdo en el que la alianza que posteriormente se conocería como la alianza de los trece se formaría, y marcaría un hito en las trece razas que la formaron dando lugar a eones de paz y tranquilidad en gran parte del vasto espacio.